Reuters | 19 de octubre de 2016
Ministros y altos parlamentarios checos mantuvieron una reunión privada con el líder espiritual tibetano exilado, el Dalai Lama, el martes, a riesgo de disgustar a China, justo en el momento en el que Praga está tratando de impulsar los lazos con Beijing.
En contraste, los cuatro funcionarios de mayor categoría del país mantuvieron su distancia de la reunión y emitieron un poco común comunicado enfatizando que la República Checa acepta que el Tíbet es parte de China y quiere mantener buenas relaciones bilaterales.
El Dalai Lama se reunió con el vice primer ministro Pavel Belobradek, el ministro de Cultura, Daniel Herman y los vice presidentes de ambas cámaras del parlamento durante su visita a una conferencia anual iniciada por el extinto Vaclav Havel, el primer presidente del país.
Havel tenía lazos personales con el Nobel de la Paz, ahora de 81 años.
Los ministros y el vicepresidente de la cámara baja del parlamento son demócrata cristianos, socio menor de la coalición de centro izquierda gobernante, y el presidente de la cámara alta está aliado con ellos. Los encuentros fueron calificados como privados.
En su declaración conjunta, publicada por la oficina del presidente Milos Zeman, los cuatro funcionarios checos de más alto rango dijeron: “Las actividades personales de algunos políticos checos no expresan un cambio en la política oficial de la República Checa y consideraríamos desafortunado que alguien lo viera de esa forma.”
La portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores chino, Hua Chunying dijo que el Dalai Lama estaba allí para participar en “actividades separatistas anti-China,” y que ellos estaban extremadamente insatisfechos con la reunión y se oponían a que funcionarios de asuntos exteriores se reunieran con él.
Sin embargo, Hua agregó que ella tomó nota de la declaración del gobierno.
“Esperamos que el lado checo siempre pueda encontrarse con China, y tomar pasos reales para mantener el buen momento presente en las relaciones sino-checas,” dijo en una rueda de prensa en Beijing.
A menudo China regaña a los países por dar cualquier reconocimiento al Dalai Lama, quien es acusado de promover l independencia para la región de los Himalayas. Él dice que busca simplemente una autonomía genuina para el Tíbet.
El ministro de Relaciones Exteriores de China dijo el lunes que habría represalias después de la reunión del presidente eslovaco Andrej Kiska con el Dalai Lama.
El gobierno checo ha sido proclive a impulsar los lazos con China. China estuvo complacida de la concurrencia de Zeman como único líder occidental, al desfile militar de 2015, en Beijing, celebrando el fin de la Segunda Guerra Mundial.
El presidente chino Xi Jinping visitó Praga en marzo, para forjar una “sociedad estratégica” con la República Checa.-