RFA | 11 de agosto de 2016
Mientras los equipos de trabajo chinos siguen trabajando en demoler las viviendas de la Academia Budista Larung Gar de Sichuan, las autoridades están forzando a muchos monjes y monjas que viven en la academia, a volver a las casas de sus familias en la vecina Región Autónoma Tibetana (TAR, por sus siglas en inglés), dijeron las fuentes de la región.
El traslado que apoya el plan chino de reducir el tamaño del complejo que creciera tan rápidamente, ha estado dirigido hasta ahora sólo a los residentes provenientes de las prefecturas de Lhasa, Ngari, Nagchu y Chamdo, todas de la TAR, dijo una fuente local al Servicio Tibetano de la RFA.
“A los familiares de los monjes y monjas de estas áreas de la TAR se les ha ordenado ir a Larung Gar para llevar a sus parientes a casa,” dijo la fuente, hablando en condición de anonimato.
Los residentes de la academia que vienen de estas áreas habían sido emplazados previamente por las autoridades y “acosados con preguntas y clases de educación patriótica,” dijo la fuente, agregando que “estas sesiones duraron semanas y en algunos casos, meses.”
Los monjes y monjas nativos de áreas de China habitadas por tibetanos como Sichuan, Qinghai y Gansu, hasta ahora no han sido objeto de órdenes de expulsión.
“Pero los monjes y las monjas que vienen del condado de Driru, en Nagchu, estuvieron entre los primeros forzados a salir,” dijo.
“Ellos fueron advertidos de las ‘consecuencias’ para sus familias de Driru si rechazaban irse, incluido su derecho a recolectar cordyceps,” un hongo altamente apreciado por sus cualidades medicinales y una importante fuente de ingresos.
Los tibetanos de Driru, un condado considerado ‘políticamente inestable’ por las autoridades chinas, han resistido por mucho tiempo las demostraciones forzadas de lealtad a Beijing, que ha impuesto duras restricciones en el área en los años recientes.
Escenas desgarradoras
Muchos miles de tibetanos y chinos han estudian en Larung Gar, la que fue fundada en 1980 por el difunto líder religioso Khenpo Jigme Phuntsok y es uno de los más grandes e importantes centros en el mundo de estudio del budismo tibetano.
La orden actual para reducir el número de residentes de Larung Gar a cerca de la mitad de un máximo de 5000 no es un plan del condado “sino que viene de las altas autoridades,” con el presidente chino Xi Jinping tomando un especial interés personal en el tema, dijeron las fuentes a RFA en informes previos.
Los líderes monásticos de Larung Gar han instado a los monjes y monjas del instituto a no resistir la destrucción de sus hogares, y se cree que el trabajo ha proseguido sin interferencias, aunque se informó de un suicidio.
“A pesar de las desgarradoras escenas de la demolición de sus casas, los monjes y monjas de Larung Gar están practicando la paciencia y la moderación y esperando que el instituto budista sobreviva,” dijo la fuente a RFA.-