Hindustan Times | Por Reetika Revathy Subramania | 9 de agosto de 2015
Cada tarde, la terraza de su hogar en Lhasa se convertía en un campo de batalla mientras los abuelos de Tenzin Lhundup jugaban duros partidos de Sho (dados) entre tazas de té de mantequilla. Ella era el juez, mediando entre los inevitables reclamos de trampa.
Eso era hace 15 años. Lhundup, de 33 años, ahora juega al tradicional juego de mesa tibetano en una aplicación de smartphone en su nuevo hogar, en Himachal Pradesh, la sede india de los tibetanos en el exilio.
“Se siente diferente, pero me hace sentir profundamente conectada a mis abuelos, que todavía están en casa, en el Tíbet,” dice ella.
Sho está entre un ramillete de nuevas aplicaciones que ayudan a que los tibetanos en el exilio se mantengan conectados con su cultura a través de la lengua, los juegos y la música.
Niño Tibetano, lanzado en julio, ayuda a los niños a aprender tibetano a través de juegos interactivos, animación, música y trivia; la aplicación del Alfabeto Tibetano, que cuenta con un año, está ayudando a los jóvenes e incluso a los de mediana edad a aprender tibetano a través de cuestionarios, plataformas de práctica y un segmento de voz sobre pronunciación; y Sho, lanzada en 2013, está ayudando a las nuevas generaciones a descubrir un juego tradicional.
Del mismo modo, la música tradicional tibetana, oraciones e incluso recetas están disponibles en aplicaciones como el Diccionario Tibetano de Imágenes, de este año; 21 Oraciones de Tara, del año pasado; y Videos de Música Tibetana, de 2012.
También está YakChat, lanzada en el 2013 como una alternativa al WeChat chino, que ofrece servicios de mensajería en tibetano y se ha vuelto particularmente popular entre los activistas. Y la aplicación de Noticias Tibetanas, lanzada en 2012, que proporciona noticias comunes.
“La tecnología ha crecido para convertirse en un medio muy potente para ayudar a preservar y documentar la literatura y la cultura tibetana,” dice el programador Tashi Nangchen, 42, fundador de 21 Oraciones de Tara, Videos de Música Tibetana y Diccionario Tibetano. “Mantiene la comunidad unida.”
Esto es particularmente importante para una comunidad que se ha dispersado por todo el mundo desde 1959, cuando el líder espiritual y político tibetano, el Dalai Lama, huyó a la India tras un fallido levantamiento contra la ocupación china. A mediados de la década de 1980, lo siguió la segunda ola de tibetanos. Ahora, frente a una arremetida de mandarín en las escuelas y de inmigrantes chinos en sus hogares, las aplicaciones son una forma para las nuevas generaciones de mantener su cultura viva en el exilio.
Niño Tibetano, por ejemplo, fue creado por un programador residente en Delhi y un exiliado tibetano, Dhondup Passang, de 27 años, con tres amigos. “Nuestro objetivo es llegar a los niños nacidos en el exilio”, dice. “Es muy importante para ellos saber nuestro idioma materno.”
Los creadores de las aplicaciones dicen que la respuesta a sus iniciativas ha sido alentadora, sugiriendo que su misión en la creación de ellas – la conservación y promoción de la cultura tibetana – está siendo encontrada. Niño Tibetano fue descargada más de 500 veces en la primera semana después de su lanzamiento. Sho ha sido descargada más de 10.000 veces. “Creo que nuestra cultura está en peligro”, dice Tenzin Tselha, de 26 años, director de programa en Students for a Free Tibet, India, quien usa la app Alfabeto Tibetano.
“La utilización de la tecnología a fin de conservar nuestra propia cultura es una forma de resistencia creativa a la opresión. Mientras la lucha permanece igual, las formas de expresión han cambiado con el tiempo.”