Hindustan Times | Por Rezaul H Laskar | 19 de julio de 2024
La embajada china dijo que el gobierno tibetano en el exilio era una “organización política separatista con la agenda de perseguir la “independencia tibetana”.
NUEVA DELHI: Rechazando la descripción de la embajada china del gobierno tibetano en el exilio como una organización “separatista”, la Administración Central Tibetana (CTA, por sus siglas en inglés) dijo el viernes que la aprobación de una nueva ley por parte de la administración estadounidense dejó en claro que el Tíbet no es un “asunto interno” de China.
La CTA, que tiene su sede en Dharamshala y representa a los tibetanos que viven en la India y en el extranjero, y la embajada de China se enzarzaron en una guerra de palabras en X después de que la misión criticara la Ley Resolve Tibet que fue firmada recientemente por el presidente estadounidense Joe Biden y dijera que Beijing solo mantendría conversaciones con representantes del Dalai Lama.
El miércoles, Penpa Tsering, el Sikyong o jefe de la CTA, dijo que las comunicaciones por canales secundarios entre el gobierno en el exilio y la parte china continuaban y que el último contacto se realizó a principios de este mes, apenas unos días antes de que el presidente Biden firmara la Ley de Resolución del Tíbet el 12 de julio.
La embajada china reaccionó a estos acontecimientos en una publicación en X, diciendo que el gobierno tibetano en el exilio es una “organización política separatista con el objetivo de lograr la ‘independencia tibetana’. Sostuvo además que el Tíbet, al que Beijing se refiere como Xizang, ha sido parte del “territorio de China desde la antigüedad”.
La embajada china se opuso a la Ley mencionada por considerar que viola los compromisos de la administración estadounidense y las normas básicas que rigen las relaciones internacionales y dijo que Beijing “solo tendrá contacto y conversaciones con el representante personal” del Dalai Lama y no con la CTA.
En respuesta, el portavoz de la CTA, Dhondup Gyalpo, dijo que la CTA es una continuación del gobierno original del Tíbet establecido en 1642 y que goza del apoyo de los tibetanos dentro del Tíbet y en la diáspora. “Además, la comunidad internacional reconoce a la CTA como el único representante legítimo del pueblo tibetano”, dijo.
El Tíbet ha sido “históricamente un país independiente y ninguna fuerza, ya sea humana o divina, puede reescribir esta historia”, afirmó Gyalpo.
“La aprobación de la Ley para la Solución del Tíbet demuestra por sí misma que el Tíbet no es meramente un ‘asunto interno’ de China y seguirá siendo un asunto de preocupación internacional hasta que el conflicto chino-tibetano se resuelva pacíficamente mediante un diálogo mutuamente beneficioso”, añadió.
La cuestión del Tíbet concierne al futuro de seis millones de tibetanos, no al “futuro personal” del Dalai Lama, quien ha dicho que una vez que los tibetanos en el exilio puedan regresar al Tíbet con una “autonomía significativa”, él no desempeñará ningún papel en el futuro gobierno del Tíbet.
Gyalpo también dijo que India es un país libre con unos medios de comunicación muy dinámicos y que “cualquier intento de intimidar o coaccionar a los medios indios está destinado al fracaso”. Respondió así a la afirmación de la embajada china de que los medios de comunicación deberían respetar las preocupaciones de China y no proporcionar una plataforma para las fuerzas “independentistas del Tíbet”.
Traducción al español por Aloma Sellanes tibetpatrialibre.org