Free Tibet 13 de mayo de 2022
Imágenes de la capital tibetana Lhasa muestran drones, puestos de control y policía
Anticipándose a las fuertes expresiones de lealtad de los tibetanos a su líder espiritual, Su Santidad el Dalai Lama, antes de su próximo cumpleaños en julio, las autoridades chinas han reforzado la seguridad en el corazón de la capital del Tíbet, Lhasa, como parte de las medidas preventivas para el mantenimiento de la estabilidad.
Las medidas incluyen el establecimiento de puntos de control de seguridad móviles en cada esquina, para realizar búsquedas aleatorias de tibetanos y revisar sus teléfonos. Las autoridades también están recurriendo al vuelo de drones sobre la ciudad para monitorear el movimiento de los tibetanos durante este momento delicado.
A pesar de la prohibición permanente de celebrar días culturales e históricos significativos, como el Día del Levantamiento Nacional Tibetano y el cumpleaños del Dalai Lama, a quien el gobierno chino ha tratado de retratar como un separatista peligroso, los tibetanos continúan desafiando esta prohibición, a pesar de los enormes riesgos para ellos mismos. Los tibetanos han marcado abiertamente este día en el pasado con reuniones, oraciones y celebraciones.
Las autoridades chinas prohíben las reuniones y celebraciones masivas, e incluso restringen las visitas con fines religiosos de los tibetanos a los monasterios en esos días. Tan solo en la última década, muchos tibetanos han sido arrestados y torturados por realizar actos religiosos simples e inofensivos, como la quema de enebro, acusados de realizar actos “separatistas” y de delitos contra la seguridad del Estado.
Tibet Watch se ha enterado de que se han instalado puestos de control policial en Lhasa, incluso todo alrededor del Templo de Jokhang, el Palacio de Potala y tres universidades monásticas: Gaden, Sera y Drepung.
Además, el personal de seguridad está realizando búsquedas aleatorias en los bolsos de los tibetanos y revisando sus teléfonos en busca de pruebas incriminatorias, como fotos de Su Santidad el Dalai Lama.
La policía también está monitoreando a los peregrinos tibetanos que realizan circunvalaciones alrededor de los lugares religiosos. Grupos de dos o más tibetanos están siendo interrogados sobre su procedencia y hacia dónde se dirigen, y la policía exige que presenten sus documentos de identidad.