26 de febrero de 2015
El informe anual 2014/15 de Amnistía Internacional condena el riesgo en el que se encuentran las libertades básicas de los tibetanos a manos del gobierno chino.
El informe de 400 páginas –publicado el 25 de febrero- documenta la condición de los derechos humanos en 160 países y territorios durante 2014, así como cubre los eventos clave de 2013.
En su sección sobre el Tíbet –bajo el subtítulo “China”- afirma: “Los tibetanos étnicos continúan enfrentando discriminación y restricciones sobre sus derechos a las libertades de creencia religiosa, expresión, asociación y reunión”.
“Varios líderes monásticos, escritores, manifestantes y activistas tibetanos fueron detenidos. Según se informó, en agosto de 2014, manifestantes tibetanos fueron baleados por la policía y las fuerzas de seguridad en Kardze, donde una multitud se reunió para protestar contra la detención de un líder de la aldea. Al menos cuatro manifestantes murieron por sus heridas y uno se suicidó en detención”, agrega el informe.
También remarca las protestas mediante autoinmolación del año pasado: “Siete personas se prendieron fuego en las áreas habitadas por tibetanos en 2014, en protesta contra políticas represivas de las autoridades chinas; al menos dos murieron como resultado […] las autoridades hicieron blanco en algunos familiares y amigos de aquellos que se autoinmolaron por supuesta ‘incitación’ o ‘complicidad’ con tales actos”.
“En algunos condados, los familiares de los inmolados, o aquellos que han asistido a las enseñanzas del Dalai Lama, o son afines a la ‘camarilla del Dalai’ o tienen ‘conexiones en el extranjero’ fueron impedidos de acceder a posiciones importantes o de presentarse como candidatos en las elecciones de las aldeas”.
El informe declaró que el número conocido de autoinmolaciones desde marzo de 2011 es de 131, aunque muchos consideran que el número alcanza a 134.
La acusación de Amnistía Internacional coincide con la noticia filtrada desde el gobierno de China de “actividades ilegales relacionadas con la independencia del Tíbet” –obtenidas y publicadas por The Tibet Post el 25 de febrero- que prueban la naturaleza cada vez más comprometida de las libertades tibetanas bajo el gobierno chino.-