Tibet.net
29 de noviembre de 2013
Denunciando las atrocidades perpetradas contra los tibetanos en el Tíbet, un grupo de diputados de todos los partidos políticos islandeses excepto el Partido Progresista del primer ministro Sigmundur Davíð Gunnlaugsson, han presentado una resolución parlamentaria impulsando al gobierno chino a reanudar las conversaciones de paz con los representantes de Su Santidad el Dalai Lama, según se informa en ruv.is y en Iceland Review Online.
La resolución insta al parlamento de Islandia a poner de relieve las preocupaciones sobre la creciente violencia y la opresión en contra de los tibetanos por parte del gobierno chino. Hace un llamamiento al parlamento para condenar la represión de las protestas pacíficas en el Tíbet y en insistir en que el gobierno chino no impida a la ONU el envío de una delegación para investigar las violaciones de derechos humanos en el Tíbet.
Alentando al gobierno chino para iniciar conversaciones de paz con los representantes de Su Santidad el Dalai Lama, los diputados sugieren que las conversaciones podrían tener lugar en Islandia.
Una declaración que acompaña a la resolución, dice que muchos parlamentos de todo el mundo han aprobado resoluciones relativas a la crítica situación en el Tíbet. Doce ganadores del Nobel de la Paz han enviado cartas al gobierno chino para impulsar las conversaciones de paz con el pueblo tibetano.
Los diputados consideran que el parlamento islandés debería adoptar una postura, sobre todo teniendo en cuenta que los altos funcionarios del gobierno chino han visitado Islandia regularmente. “Nosotros, los islandeses tenemos la obligación moral bajo nuestro acuerdo de libre comercio con China, que entrará en vigor a principios de 2014, de poner de relieve que no vamos a aceptar violaciones de derechos humanos del tipo descrito en la declaración.”
La semana pasada, el Dr. Lobsang Sangay Sikyong, el líder democráticamente electo y sucesor político de Su Santidad el Dalai Lama, reiteró el compromiso con el diálogo para encontrar una solución a la cuestión del Tíbet en el marco de la Constitución china.
“La situación en el Tíbet es trágica y lamentable. Más de 122 tibetanos se han prendido fuego para protestar contra las políticas del gobierno chino de represión, persecución religiosa, asimilación cultural, discriminación económica y destrucción del medio ambiente en el Tíbet”, dijo el líder político del Tíbet a los periodistas en Shimla.-